Inspección de Trabajo intensificará sus actuaciones para acabar con los falsos autónomos.
Los falsos autónomos son trabajadores que no están dados de alta en la plantilla de la empresa, pero actúan como asalariados de ésta. Están sujetas a los horarios, jornadas, tareas y disciplina de la empresa, sin mantener una relación laboral.
Esta relación la enmarcan en un contrato mercantil, de esta forma el autónomo factura a la empresa los trabajos que ha realizado por encargo de ésta.
Con este tipo de relación lo que se pretende es un ahorro en los costes sociales, al tiempo que hacer más fácil prescindir de estos trabajadores, a diferencia de un asalariado.
Consecuencias de tener contratado a un falso autónomo
Si la Inspección de Trabajo detecta que una empresa tiene un falso autónomo, podrá ser sancionada con una multa que va de 3.126 € a 10.000 €. Además, podrá exigir la liquidación de las cuotas a la Seguridad Social hasta los últimos 4 años, y con un recargo que puede llegar a ser del 150%.
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